Tensión en la Asamblea del STM: Los trabajadores rechazan la baja salarial del 13%

Tensión en la Asamblea del STM: Los trabajadores rechazan la baja salarial del 13%
Esta mañana, el Galpón del Ferrocarril fue escenario de la asamblea del Sindicato de Trabajadores Municipales (STM), en la que el clima fue tan caluroso como el descontento generalizado entre los afiliados.
Luego de una reunión entre el secretario gremial Néstor Batista y el Ejecutivo municipal, se presentó ante los trabajadores un acta que formalizaba la polémica baja del 13% en los sueldos, 6,5% en mayo y otro 6,5% en junio, una medida que ya venía generando rechazo en días anteriores. Además también se detalló otras reducciones: el Ejecutivo se bajaría un 14,6% sus ingresos, se recortarían $10 millones a los programas de cooperativistas, y se ajustarían las horas de trabajo de ciertos empleados y médicos.
Pero la propuesta fue categóricamente rechazada. Por unanimidad, los trabajadores decidieron no firmar el acta. La bronca principal: no están dispuestos a aceptar que compañeros con sueldos por debajo de la canasta básica vean reducido aún más su ingreso, mientras, según el sindicato hay funcionarios que cobran hasta $5.600.000.
Desde el gremio fueron más allá
Propusieron que todos los funcionarios del Ejecutivo pasen a desempeñarse como ayudantes de servicio de 24 horas, argumentando que "el verdadero trabajo lo hacen los municipales". También apuntaron contra los concejales, pese a que algunos ya aplicaron el recorte del 13%. "No alcanza", dicen desde el sindicato, que exige una rebaja más sustancial y reclama que el gasto por concejal no supere $1.500.000.
El malestar creció, los afiliados anunciaron que no avalarán ningún acuerdo que implique tocar el salario de los trabajadores. Advirtieron que esperarán las próximas medidas que adopte el intendente, entre ellas, un posible decreto para establecer jornadas de 35 horas y que, en base a eso, definirán los pasos a seguir.
El mensaje del STM fue claro: el ajuste no puede recaer sobre los empleados. Que lo paguen los cargos políticos.